Diviértete con tu bebé realizando estos ejercicios de estimulación temprana

Los primeros 4 años son los más importantes en el desarrollo del bebé ya que su cerebro es como una esponja que absorbe todo lo que ve, escucha y siente. Para apoyarlo en su aprendizaje y desarrollo físico y emocional, la estimulación temprana es una excelente opción.

¿Qué es la estimulación temprana?

La estimulación temprana es un método de enseñanza que le permitirá a tu hijo/a fortalecer su cuerpo y desarrollar su cerebro y funciones cognitivas, lingüísticas, motoras y sociales. Existen distintas técnicas que puedes realizar desde la comodidad de tu hogar o lugar de trabajo con los objetos que tengas a tu alcance. A continuación los distintos tipos de estimulación temprana que puedes poner en práctica:

  • Estimulación motora gruesa: contribuirá al desarrollo del movimiento y equilibrio de sus piernitas, brazos, cabeza y tronco.
  • Estimulación motora fina: lo ayudará a desarrollar sus habilidades con las manos.
  • Estimulación del lenguaje: lo ayudará a desarrollar el habla por medio de la comunicación contigo.
  • Estimulación social y afectiva: le enseñará a expresar sus emociones.

Estimulacion temprana por etapas

El desarrollo del bebé está relacionado a su edad y es importante que las actividades que realices sean las más adecuadas para cada etapa de su vida. A continuación te dejamos algunos tips para hacerlo:

De 0 – 3 meses

Estimulación corporal

  • Dale masajes suavemente en su espaldita, abdomen, brazos y piernas para desarrollar sus músculos.
  • Abre sus manitos y dale masajes en las palmas y deditos, al igual que en las plantas de los pies.
  • Flexiona suavemente sus piernitas de abajo hacia arriba, y haciendo pequeños círculos de adentro hacia afuera y viceversa.
  • Mueve suavemente sus bracitos de adentro hacia afuera y viceversa.

Visión y audición

  • Pon música con distintos instrumentos musicales.
  • Convérsale mientras lo miras a su carita.
  • Llévalo a lugares con tonos de luz distintos.
  • Haz sonar objetos cerca de sus oídos, procura que no sean muy fuertes.

Lenguaje

  • Imita todos sus sonidos y háblale con claridad.
  • Cárgalo, colócalo junto a tu pecho y cántale.

Social

  • Cada vez que le hables, tu voz debe ser suave y amorosa.
  • Dale muchos besos.
  • Siempre sonríele.

De 4 – 6 meses

Estimulación motora gruesa

  • Boca abajo dale masajes en su espalda con tus dedos, realizando movimientos de arriba hacia abajo, nunca en sentido contrario.
  • Boca abajo, coloca delante de él un juguete colorido y con tu palma suavemente empuja la planta de su piecito hacia adelante.
  • Siéntalo junto a varios cojines para que no caiga de lado.
  • Juega con sus manos y ayúdalo a aplaudir.
  • Mientras lo vistas o lo bañes siéntalo, así fortalecerá poco a poco sus músculos.

Estimulación motora fina

  • Una vez que logre sostener objetos en sus manos, deja que los analice y que juegue con ellos.
  • Coloca objetos de distintas texturas y que llamen su atención cerca de su mano, anímalo a tomarlos.
  • Toma su mano y hazle sentir su nariz, boca, ojos.
  • Ayúdalo a aplaudir frente a su cara.

Lenguaje

  • Llámalo por su nombre de forma clara.
  • Cada vez que grite o balbucee, imítalo y convérsale.
  • Háblale y sonríele siempre.

Social

  • Prémialo con una sonrisa por sus logros.
  • Colócalo frente a un espejo y dile «Este eres tu».
  • Acostúmbralo a compartir con otras personas.
  • Cubre su carita y espera a que se descubra.

De 6 – 12 meses

Estimulación motora gruesa

  • Siéntalo sin apoyo de sus brazos sobre el piso, empújalo suavemente por los hombros de un lado a otro hasta que aprenda a colocar sus brazos él mismo.
  • Si aún no gatea, colócalo boca abajo con una almohada bajo su pecho y pancita y enséñale a usar sus brazos y piernas en forma de gateo.
  • Muéstrale juguetes llamativos e incentiva que los coja.
  • Enséñale a pararse, primero colócalo de rodillas y apoyándose en ti ayúdalo a levantarse poco a poco.
  • Cuando intente caminar toma sus dos manitos y a medida que tenga mayor equilibrio suéltale una y después la otra.
  • Ponlo de pie y siempre anímalo a caminar.

Estimulación motora fina

  • Enséñale a juntar sus manos.
  • Coloca distintos objetos en cada manito y enséñale a que golpee uno con el otro.
  • Anímale a que coja juguetes pequeños con su dedo índice y pulgar.
  • Dale una pelota grande y enséñale a aventarla.
  • Déjalo comer solo.
  • Ponle una cuchara de plástico en su mano y con movimientos lentos y precisos haz que te imite para comer.
  • Dale hojas de papel y déjale que las arrugue, siempre pendiente de que no se las lleve a la boca.

Lenguaje

  • Cuando le quieras decir algo que no debe hacer, explícale por qué usando palabras y gestos.
  • Practica con tu bebé palabras cortas como «ten» y «dame».
  • Sácalo de la casa para que escuche sonidos distintos, nombra claramente objetos que llamen su atención.
  • Mientras come, nombra los alimentos.
  • Cuando diga palabras nuevas, repítele y felicítalo.
  • Responde a sus balbuceos como una conversación.
  • Siempre háblale claramente, sin modificar palabras ni usar diminutivos.
  • Enséñale distintos sonidos de animales.
  • Enséñale las distintas partes del cuerpo mientras lo bañas.

Social

  • Esconde su juguete debajo de su cobija y anímalo a buscarlo.
  • Enséñale a saludar y despedirse con su mano.
  • Enséñale a que te de cosas y agradécele.
  • Llévalo a jugar con otros niños.
  • Enséñale actividades como lavarse las manos.
  • Enséñale a ordenar sus juguetes.

De 12 – 18 meses

Estimulación motora gruesa

  • Siéntalo en el piso, ofrécele un juguete que llame su atención, y haz que se levante para tomarlo.
  • Juega con él a agacharse y levantarse repetidamente.
  • Permítele que conozca cada rincón de la casa.
  • Coloca una soga en una caja llena de sus juguetes y haz que jale de ella.
  • Cuando escuchen música, canta y baila con él/ella.

Estimulación motora fina

  • Enséñale a golpear una olla con cucharas de palo.
  • Crea una torre con cubos o frascos de 4 pisos y haz que te imite.
  • Permítele jugar con arena y agua.
  • Abre un libro y enséñale las figuras y a pasar de página.

Estimulación del lenguaje

  • Pídele que te traiga cosas que señales, diciendo claramente el nombre del objeto.
  • Enséñale las partes del cuerpo ayudándolo a señalar con sus manos mientras le dices: “Esta es tu nariz”.
  • Llámalo claramente por su nombre y enséñale a repetirlo.
  • Cuando esté junto a ti, explícale lo que estás realizando y cómo lo estás haciendo.

Estimulación social y afectiva

  • Permítele que coma solo y que comparta con la familia en la mesa.
  • Enséñale a decir «hola», «por favor» y «gracias».
  • Mientras lo bañas, déjalo tocar el jabón y jabonarse.
  • Permítele compartir con más niños, por supuesto sin forzarlo a que lo haga.

De 18 – 24 meses


Estimulación motora gruesa

  • Juega a las carreritas o a que lo persigues.
  • Enséñale a patear la pelota.
  • Permite que escale lugares pequeños como sillones o la cama, teniendo siempre mucho cuidado.
  • Llévalo al parque y deja que camine y corra a su ritmo.

Estimulación motora fina

  • Deja que raye libremente en una hoja de papel.
  • Enséñale a tapar y destapar frascos.
  • Pídele que arme una torre con objetos de distintos tamaños.
  • Enséñale a hacer bolitas de papel o de masas.

Estimulación del lenguaje

  • Hazle repetir el nombre de personas o de cosas de la casa.
  • Llévalo de paseo a lugares distintos y llenos de cosas para que le enseñes a nombrarlas.
  • Pídele que señale partes de su cuerpo y que diga sus nombres.
  • Conversa con él/ella de cualquier cosa y explícale el por qué de las cosas.

Estimulación social y afectiva

  • Déjale que te ayude a vestirlo.
  • Pídeles a los demás que le llamen por su nombre.
  • Continúa animándolo a compartir con personas de distintas edades.
  • Permítele que te ayude con tareas del hogar.

Es importante que en todas las etapas de tu bebé le demuestres tu amor y respeto. Recuerda también estar siempre en un ambiente cálido y seguro donde se sientan en confianza. Procura siempre premiar sus logros y no lo fuerces si algunas cosas no le salen al primer intento, pues cada bebé es un mundo distinto y su tiempo de aprendizaje también.